CONOCE EL MÉTODO KUMON
Este enfoque es exactamente lo que en Kumon llevamos más de 60 años poniendo en práctica. Nuestro método se basa en la idea de que cada niño puede aprender a su propio ritmo, desarrollando habilidades esenciales para su futuro personal y profesional.
Más que memorizar: aprender a aprender
Uno de los principales objetivos de la educación por competencias es que los alumnos adquieran herramientas para pensar de forma crítica, resolver problemas y aplicar lo aprendido en distintos contextos. Ya no se trata solo de memorizar datos que pronto se olvidarán, sino de construir un aprendizaje profundo y útil.
Según la Oficina Internacional de Educación de la UNESCO, las competencias clave para el siglo XXI incluyen la autonomía en el aprendizaje, la capacidad de interactuar con los demás, la gestión de recursos y herramientas, y el pensamiento interdisciplinar. En Kumon, trabajamos estas competencias, permitiendo que los niños no solo adquieran conocimientos, sino que también aprendan a ser autosuficientes y perseverantes.
Cómo desarrollar competencias en los niños
Educar por competencias significa darles a los niños un papel activo en su aprendizaje. No basta con transmitir información, hay que enseñarles a gestionar su propio conocimiento y a aplicar lo que aprenden en su día a día.
- Fomentar la motivación y la curiosidad
El aprendizaje tiene que despertar el interés del niño. Cuando un niño se siente motivado, disfruta aprendiendo y experimenta la satisfacción de superar retos. La clave está en ofrecer experiencias de aprendizaje positivas que refuercen su confianza y su capacidad para enfrentarse a nuevos desafíos.
- Aprender a su propio ritmo
Cada niño es único y tiene su propio ritmo de aprendizaje. Si un niño avanza demasiado rápido, puede frustrarse; si avanza demasiado lento, puede perder el interés. La personalización es clave para que el aprendizaje sea efectivo. Como dice el pedagogo Gregorio Luri: «La mejor manera de fomentar el interés y la motivación para aprender de nuestros hijos es ayudándolos a incrementar su conocimiento del mundo».
En Kumon, adaptamos el aprendizaje a las necesidades de cada alumno, permitiéndoles avanzar de forma gradual y progresiva.
- Desarrollar la autonomía y la confianza
Educar por competencias es enseñar a los niños a aprender por sí mismos. Si queremos que sean responsables, tenemos que darles autonomía, permitirles equivocarse y ayudarles a encontrar la solución por sí solos.
¿Has visto la cara de un niño cuando consigue hacer algo sin ayuda? Es una de las mejores formas de reforzar su autoestima. Más allá de enseñarles matemáticas, lectura o inglés, lo más importante es proporcionarles herramientas para que aprendan a aprender.
- Mejorar la concentración
En un mundo lleno de distracciones, la capacidad de concentración es más importante que nunca. Al principio, un niño puede tener dificultades para centrarse en una tarea durante más de cinco minutos, pero con el entrenamiento adecuado, su capacidad de atención mejora de forma significativa.
El neuropsicólogo Álvaro Bilbao lo resume así: «El cerebro de nuestros hijos necesita aprender a focalizar su energía y centrar su atención». En Kumon, trabajamos esta habilidad de manera progresiva, ayudando a los niños a concentrarse durante períodos cada vez más largos y a desarrollar la autodisciplina.
- Crear hábitos de estudio y constancia
El éxito no depende solo del talento, sino de la perseverancia. Las rutinas son esenciales para organizarse, ser constantes y alcanzar objetivos.
Dedicar unos minutos al aprendizaje cada día tiene un impacto enorme a largo plazo. En Kumon, ayudamos a los niños a interiorizar hábitos de estudio que les servirán no solo en su etapa escolar, sino en cualquier reto que enfrenten en el futuro. Como dice el experto en talento Fernando Botella: «Si queremos que nuestros hijos triunfen en aquello que se propongan, enseñémosles el valor de la perseverancia y la importancia del entusiasmo, de amar lo que hacen».
El aprendizaje como base para el futuro
La educación basada en competencias no es solo una metodología, es una forma de preparar a los niños para la vida. Dejamos atrás la enseñanza basada en la memorización y damos paso a un aprendizaje más práctico y profundo, donde los niños desarrollan habilidades que les servirán en cualquier ámbito: desde el colegio hasta su futuro profesional.
En Kumon, aplicamos este enfoque en cada sesión. Nuestro método potencia la autonomía, la confianza, la concentración y el amor por el aprendizaje, ayudando a cada niño a desarrollar su máximo potencial. Porque la educación no consiste en dar respuestas, sino en enseñar a encontrarlas.
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