En un mundo donde la sostenibilidad es cada vez más el eje central para el futuro, la educación ambiental desde la infancia se destaca como una herramienta esencial. La celebración del Día Mundial de la Educación Ambiental resalta la importancia de fomentar valores ecológicos en las nuevas generaciones. Y esto influye también en la necesidad de impulsar su participación activa en la protección y cuidado de nuestro planeta.
Un informe realizado por ANFEVI, la Asociación Nacional de Fabricantes de Envases de Vidrio, muestra que cada vez se introduce más cantidad de vidrio reciclado en los hornos de fabricación de nuevos envases y, de hecho, es el componente mayoritario en la actualidad. Un dato muy importante teniendo en cuenta que con una tonelada de vidrio reciclado se evita la extracción de 1,2 toneladas de materia prima. Además, el uso de vidrio reciclado disminuye en un 53% las emisiones de CO2 y permite ahorrar un 38% de energía en todo el proceso.
No obstante, fomentar el reciclaje de vidrio entre adultos y pequeños puede ayudarnos a marcar la diferencia. Cada vez que depositamos un envase de vidrio en el contenedor de reciclaje, estamos contribuyendo al ahorro energético y, por lo tanto, al cuidado de la naturaleza que nos rodea. Es más, el hecho de reciclar hasta diez envases de vidrio equivaldría a apagar todas las luces y todos los equipos eléctricos en todos los hospitales de España durante dos meses completos.
En este sentido, la relevancia de la educación ambiental se hace más evidente en este contexto. Durante el año 2023, en España, se ha reflejado un sólido compromiso ambiental por parte de los ciudadanos. Así, más del 70% de los envases de vidrio fueron reciclados, equivalente a aproximadamente 9 millones de envases diarios o más de 6.000 cada minuto1. Esta tasa de reciclaje de vidrio demuestra una firme responsabilidad y conciencia ambiental en la sociedad española.
En este ámbito, y con motivo del Día Mundial de la Educación Ambiental, ANFEVI destaca tres formas sencillas de concienciar sobre la protección del medioambiente en la infancia a través del vidrio:
- Concienciación desde el hogar
La práctica del reciclaje en casa, adoptada como una actividad familiar, es esencial para inculcar valores de sostenibilidad en los niños desde una edad temprana. Por ejemplo, establecer un contenedor específico en el hogar para el vidrio, ayuda a incentivar a los niños a habituarse desde pequeños a esta práctica. Esta acción cotidiana no solo facilita la separación de residuos, sino que también sirve como herramienta educativa para enseñar a los más jóvenes la importancia de cuidar el medioambiente y apoyar la sostenibilidad. De esta forma, las familias pueden fomentar un hábito de vida sostenible y responsable en los niños desde bien pequeños.
- La constancia, pilar fundamental
Mantener la práctica del reciclaje incluso durante las vacaciones, reuniones y fiestas es crucial, y que debe ser, además, aplaudida y celebrada. Es vital que los adultos den ejemplo y recuerden a los niños la importancia de seguir reciclando vidrio en estos contextos. Se puede llevar a cabo mediante la identificación y uso de contenedores de reciclaje disponibles en los lugares de vacaciones o eventos, así como alentando a los niños a ser conscientes del reciclaje incluso fuera de casa. Este ejercicio constante refuerza el hábito del reciclaje en los más pequeños, mostrando que es una responsabilidad que trasciende situaciones y lugares.
- Educación interactiva y práctica
Implementar programas educativos en los colegios, que incorporen actividades prácticas vinculadas al reciclaje y uso del vidrio. Kids Corner, iniciativa desarrollada por Friends of Glass, busca fomentar buenos hábitos y decisiones cotidianas en los más pequeños para el cuidado del planeta, ofreciendo recursos y actividades para aprender jugando. A través de la educación, se pueden, por ejemplo, incluir talleres u otras actividades donde los niños puedan aprender de manera práctica y tangible sobre el reciclaje de vidrio. Esta metodología interactiva no solo puede aumentar el conocimiento y la conciencia sobre la importancia del reciclaje y la sostenibilidad, sino que también fomenta un aprendizaje activo y participativo, crucial para el desarrollo de una actitud ecológica desde una edad temprana.
“La protección del medioambiente y el uso del vidrio como material sostenible es un compromiso colectivo, y cada uno de nosotros, desde las familias hasta los colegios así como los diferentes agentes de la industria vidriera, jugamos un papel vital en la educación y formación de las futuras generaciones. Al trabajar juntos, podemos crear un impacto significativo y duradero en el desarrollo sostenible de la sociedad y en la salud de nuestro planeta”, afirma Karen Davies, Secretaria General de Anfevi.
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